En 1950 Ismael Gutiérrez, una persona de carácter emprendedor, fundó la primera empresa de la localidad para la elaboración de la aceituna.
Eran tiempos difíciles, y necesitaba elaborar un producto de calidad para tener presencia en el mercado. Gracias a su amor por el trabajo, su paciencia y dedicación, consiguió en poco tiempo un amplio reconocimiento.
El único y especial sabor de sus aceitunas incremento la demanda y no fue suficiente su esfuerzo y el de los pocos operarios para mantener la producción.
Se fueron incorporando sus hijos a la empresa con lo que se convirtió Aceitunas Gutiérrez en lo que es ahora, una empresa de tradición familiar de más de 50 años.
En esta tercera generación, Aceitunas Gutiérrez elabora, envasa y distribuye una amplia gama de productos propios para poder llegar mas allá de las exigencias del mercado.
Con un minucioso proceso de elaboración, complejo y artesanal, que cumple con todo los requisitos higiénicos y sanitarios, utiliza los mejores productos naturales con la finalidad de ofrecer a sus clientes una calidad excepcional.